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1 | | | editorial | |
| 3.88 | y de su abuela desalmada, 1972, | Editorial Sudamericana.)
Los primeros niños que |
71 | | | el | |
| 1.0 | | El ahogado más hermoso del mundo
(De: La |
| 5.30 | Los primeros niños que vieron | el promontorio oscuro y sigiloso que se |
| 5.83 | oscuro y sigiloso que se acercaba por | el mar, se hicieron la ilusión de que era |
| 7.144 | casualidad y dio la voz de alarma en | el pueblo. Los hombres que lo cargaron |
| 7.362 | estado demasiado tiempo a la deriva y | el agua se le había metido dentro de los |
| 7.434 | de los huesos. Cuando lo tendieron en | el suelo vieron que había sido mucho más |
| 7.668 | naturaleza de ciertos ahogados. Tenía | el olor del mar, y sólo la forma permitía |
| 7.726 | sólo la forma permitía suponer que era | el cadáver de un ser humano, porque su |
| 9.70 | para saber que era un muerto ajeno. | El pueblo tenía apenas unas veinte casas |
| 9.173 | de piedras sin flores, desperdigadas en | el extremo de un cabo desértico. La tierra |
| 9.267 | que las madres andaban siempre con | el temor de que el viento se llevara a los |
| 9.283 | andaban siempre con el temor de que | el viento se llevara a los niños, y a los |
| 9.415 | que tirarlos en los acantilados. Pero | el mar era manso y pródigo, y todos los |
| 11.40 | Aquella noche no salieron a trabajar en | el mar. Mientras los hombres averiguaban |
| 11.184 | cuidando al ahogado. Le quitaron | el lodo con tapones de esparto, le |
| 11.588 | la muerte con altivez, pues no tenía | el semblante solitario de los otros |
| 11.857 | se quedaron sin aliento. No sólo era | el más alto, el más fuerte, el más viril y |
| 11.870 | sin aliento. No sólo era el más alto, | el más fuerte, el más viril y el mejor |
| 11.885 | No sólo era el más alto, el más fuerte, | el más viril y el mejor armado que habían |
| 11.900 | más alto, el más fuerte, el más viril y | el mejor armado que habían visto jamás |
| 13.18 | en la imaginación.
No encontraron en | el pueblo una cama bastante grande para |
| 13.538 | sentadas en círculo, contemplando | el cadáver entre puntada y puntada, les |
| 13.590 | puntada y puntada, les parecía que | el viento no había sido nunca tan tenaz ni |
| 13.633 | viento no había sido nunca tan tenaz ni | el Caribe había estado nunca tan ansioso |
| 13.746 | esos cambios tenían algo que ver con | el muerto. Pensaban que si aquel hombre |
| 13.814 | hombre magnífico hubiera vivido en | el pueblo, su casa habría tenido las |
| 13.871 | habría tenido las puertas más anchas, | el techo más alto y el piso más firme, y |
| 13.891 | puertas más anchas, el techo más alto y | el piso más firme, y el bastidor de su |
| 13.912 | techo más alto y el piso más firme, y | el bastidor de su cama habría sido de |
| 13.1176 | y habría puesto tanto empeño en | el trabajo que hubiera hecho brotar |
| 13.1493 | noche, y terminaron por repudiarlos en | el fondo de sus corazones como los seres |
| 17.310 | Lautaro. Pero fue una ilusión vana. | El lienzo resultó escaso, los pantalones |
| 17.545 | adelgazaron los silbidos del viento y | el mar cayó en el sopor del miércoles. El |
| 17.560 | silbidos del viento y el mar cayó en | el sopor del miércoles. El silencio acabó |
| 17.584 | el mar cayó en el sopor del miércoles. | El silencio acabó con las últimas dudas |
| 17.1338 | de miedo siéntese aquí Esteban, hágame | el favor, y él recostado contra las |
| 17.1745 | espérate siquiera hasta que hierva | el café, eran los mismos que después |
| 17.1803 | mismos que después susurraban ya se fue | el bobo grande, qué bueno, ya se fue el |
| 17.1840 | el bobo grande, qué bueno, ya se fue | el tonto hermoso. Esto pensaban las |
| 17.2149 | las primeras grietas de lágrimas en | el corazón. Fue una de las más jóvenes la |
| 17.2350 | más deseos sentían de llorar, porque | el ahogado se les iba volviendo cada vez |
| 17.2440 | hasta que lo lloraron tanto que fue | el hombre más desvalido de la tierra, el |
| 17.2478 | el hombre más desvalido de la tierra, | el más manso y el más servicial, el pobre |
| 17.2493 | desvalido de la tierra, el más manso y | el más servicial, el pobre Esteban. Asi |
| 17.2511 | el más manso y el más servicial, | el pobre Esteban. Asi que cuando los |
| 17.2588 | hombres volvieron con la noticia de que | el ahogado no era tampoco de los pueblos |
| 21.184 | que querían era quitarse de una vez | el estorbo del intruso antes de que |
| 21.230 | del intruso antes de que prendiera | el sol bravo de aquel día árido y sin |
| 21.405 | de altura, para que resistieran | el peso del cuerpo hasta los acantilados |
| 21.829 | les ocurrían a las mujeres para perder | el tiempo. Andaban como gallinas asustadas |
| 21.1170 | mira que casi me haces caer sobre | el difunto, a los hombres se les subieron |
| 21.1819 | le quitó entonces al cadáver | el pañuelo de la cara, y también los |
| 23.192 | acento de gringo, con su guacamaya en | el hombro, con su arcabuz de matar |
| 23.278 | pero Esteban solamente podía ser uno en | el mundo, y allí estaba tirado como un |
| 23.459 | a cuchillo. Bastó con que le quitaran | el pañuelo de la cara para darse cuenta de |
| 23.760 | yo mismo un áncora de galeón en | el cuello y hubiera trastabillado como |
| 25.667 | entre sí. Algunos marineros que oyeron | el llanto a la distancia perdieron la |
| 25.839 | de sirenas. Mientras se disputaban | el privilegio de llevarlo en hombros por |
| 25.1205 | cuando lo quisiera, y todos retuvieron | el aliento durante la fracción de siglos |
| 25.1283 | que demoró la caída del cuerpo hasta | el abismo. No tuvieron necesidad de |
| 25.1593 | altos, los pisos más firmes, para que | el recuerdo de Esteban pudiera andar por |
| 25.1719 | y que nadie se atreviera a susurrar en | el futuro ya murió el bobo grande, qué |
| 25.1738 | a susurrar en el futuro ya murió | el bobo grande, qué lástima, ya murió el |
| 25.1776 | el bobo grande, qué lástima, ya murió | el tonto hermoso, porque ellos iban a |
| 25.1910 | memoria de Esteban, y se iban a romper | el espinazo excavando manantiales en las |
| 25.2144 | por un olor de jardines en altamar, y | el capitán tuviera que bajar de su alcázar |
| 25.2296 | de medallas de guerra, y señalando | el promontorio de rosas en el horizonte |
| 25.2323 | y señalando el promontorio de rosas en | el horizonte del Caribe dijera en catorce |
| 25.2392 | en catorce idiomas, miren allá, donde | el viento es ahora tan manso que se queda |
| 25.2476 | dormir debajo de las camas, allá, donde | el sol brilla tanto que no saben hacia |
| 25.2555 | dónde girar los girasoles, sí, allá, es | el pueblo de Esteban.
Encontrado en: http |
1 | | | eligieron | |
| 25.446 | devolverlo huérfano a las aguas, y le | eligieron un padre y una madre entre los mejores |
2 | | | ellas | |
| 17.2638 | no era tampoco de los pueblos vecinos, | ellas sintieron un vacío de júbilo entre las |
| 21.1432 | lo iban a masticar los tiburones, pero | ellas seguían tripotando sus reliquias de |
3 | | | ellos | |
| 23.117 | dicho Sir Walter Raleigh, quizás, hasta | ellos se habrían impresionado con su acento |
| 23.1196 | sus mujeres se cansaran de soñar con | ellos para soñar con los ahogados, hasta ésos |
| 25.1801 | ya murió el tonto hermoso, porque | ellos iban a pintar las fachadas de colores |
1 | | | empeño | |
| 13.1166 | por sus nombres, y habría puesto tanto | empeño en el trabajo que hubiera hecho brotar |
1 | | | empezaron | |
| 21.1241 | subieron al hígado las suspicacias, y | empezaron a rezongar que con qué objeto tanta |
1 | | | empezó | |
| 17.2195 | Fue una de las más jóvenes la que | empezó a sollozar. Las otras, asentándose |
49 | | | en | |
| 5.256 | una ballena. Pero cuando quedó varado | en la playa le quitaron los matorrales de |
| 7.67 | tarde, enterrándolo y desenterrándolo | en la arena, cuando alguien los vio por |
| 7.141 | por casualidad y dio la voz de alarma | en el pueblo. Los hombres que lo cargaron |
| 7.431 | de los huesos. Cuando lo tendieron | en el suelo vieron que había sido mucho |
| 7.526 | todos los hombres, pues apenas si cabía | en la casa, pero pensaron que tal vez la |
| 7.624 | creciendo después de la muerte estaba | en la naturaleza de ciertos ahogados |
| 9.170 | de piedras sin flores, desperdigadas | en el extremo de un cabo desértico. La |
| 9.390 | causando los años tenían que tirarlos | en los acantilados. Pero el mar era manso |
| 9.470 | y pródigo, y todos los hombres cabían | en siete botes. Así que cuando encontraron |
| 11.37 | Aquella noche no salieron a trabajar | en el mar. Mientras los hombres |
| 11.103 | averiguaban si no faltaba alguien | en los pueblos vecinos, las mujeres se |
| 11.446 | profundas, y que sus ropas estaban | en piltrafas, como si hubiera navegado por |
| 11.995 | cuando lo estaban viendo no les cabía | en la imaginación.
No encontraron en el |
| 13.15 | en la imaginación.
No encontraron | en el pueblo una cama bastante grande para |
| 13.513 | con dignidad. Mientras cosían sentadas | en círculo, contemplando el cadáver entre |
| 13.811 | aquel hombre magnífico hubiera vivido | en el pueblo, su casa habría tenido las |
| 13.1173 | nombres, y habría puesto tanto empeño | en el trabajo que hubiera hecho brotar |
| 13.1288 | áridas y hubiera podido sembrar flores | en los acantilados. Lo compararon en |
| 13.1322 | en los acantilados. Lo compararon | en secreto con sus propios hombres |
| 13.1398 | pensando que no serían capaces de hacer | en toda una vida lo que aquél era capaz de |
| 13.1447 | vida lo que aquél era capaz de hacer | en una noche, y terminaron por repudiarlos |
| 13.1490 | una noche, y terminaron por repudiarlos | en el fondo de sus corazones como los |
| 17.557 | los silbidos del viento y el mar cayó | en el sopor del miércoles. El silencio |
| 17.1033 | le estorbaba. Lo vieron condenado | en vida a pasar de medio lado por las |
| 17.1136 | con los travesaños, a permanecer de pie | en las visitas sin saber qué hacer con sus |
| 17.1449 | señora, así estoy bien, con los talones | en carne viva y las espaldas escaldadas de |
| 17.1515 | escaldadas de tanto repetir lo mismo | en todas las visitas, no se preocupe |
| 17.2146 | las primeras grietas de lágrimas | en el corazón. Fue una de las más jóvenes |
| 21.543 | para que fondeara sin tropiezos | en los mares más profundos donde los peces |
| 21.899 | asustadas picoteando amuletos de mar | en los arcones, unas estorbando aquí |
| 21.1538 | tropezando, mientras se les iba | en suspiros lo que no se les iba en |
| 21.1571 | iba en suspiros lo que no se les iba | en lágrimas, así que los hombres |
| 23.189 | su acento de gringo, con su guacamaya | en el hombro, con su arcabuz de matar |
| 23.275 | pero Esteban solamente podía ser uno | en el mundo, y allí estaba tirado como un |
| 23.698 | un lugar más discreto para ahogarse, | en serio, me hubiera amarrado yo mismo un |
| 23.757 | amarrado yo mismo un áncora de galeón | en el cuello y hubiera trastabillado como |
| 23.823 | como quien no quiere la cosa | en los acantilados, para no andar ahora |
| 23.1033 | que ver conmigo. Había tanta verdad | en su modo de estar, que hasta los hombres |
| 23.1279 | y otros más duros, se estremecieron | en los tuétanos con la sinceridad de |
| 25.150 | mujeres que habían ido a buscar flores | en los pueblos vecinos regresaron con |
| 25.865 | se disputaban el privilegio de llevarlo | en hombros por la pendiente escarpada de |
| 25.1716 | y que nadie se atreviera a susurrar | en el futuro ya murió el bobo grande, qué |
| 25.1944 | el espinazo excavando manantiales | en las piedras y sembrando flores en los |
| 25.1978 | en las piedras y sembrando flores | en los acantilados, para que en los |
| 25.2007 | flores en los acantilados, para que | en los amaneceres de los años venturosos |
| 25.2130 | sofocados por un olor de jardines | en altamar, y el capitán tuviera que bajar |
| 25.2320 | y señalando el promontorio de rosas | en el horizonte del Caribe dijera en |
| 25.2354 | rosas en el horizonte del Caribe dijera | en catorce idiomas, miren allá, donde el |
| 27.11 | es el pueblo de Esteban.
Encontrado | en: http://www.gador.com.ar/cys/comunidad |
1 | | | encadenarle | |
| 21.457 | cuerpo hasta los acantilados. Quisieron | encadenarle a los tobillos un ancla de buque |
2 | | | encima | |
| 5.386 | de cardúmenes y naufragios que llevaba | encima, y sólo entonces descubrieron que era |
| 21.1383 | estoperoles y calderetas que llevara | encima se lo iban a masticar los tiburones |
1 | | | encontrado | |
| 27.0 | sí, allá, es el pueblo de Esteban.
| Encontrado en: http://www.gador.com.ar/cys |
2 | | | encontraron | |
| 9.501 | cabían en siete botes. Así que cuando | encontraron al ahogado les bastó con mirarse los |
| 13.3 | no les cabía en la imaginación.
No | encontraron en el pueblo una cama bastante grande |
1 | | | enemigo | |
| 5.134 | hicieron la ilusión de que era un barco | enemigo. Después vieron que no llevaba banderas |
1 | | | enterrándolo | |
| 7.36 | Habían jugado con él toda la tarde, | enterrándolo y desenterrándolo en la arena, cuando |
6 | | | entonces | |
| 5.401 | y naufragios que llevaba encima, y sólo | entonces descubrieron que era un ahogado |
| 11.811 | de la clase de hombre que era, y | entonces se quedaron sin aliento. No sólo era el |
| 13.332 | y su hermosura, las mujeres decidieron | entonces hacerle unos pantalones con un buen |
| 17.878 | a dejarlo tirado por los suelos. Fue | entonces cuando comprendieron cuánto debió haber |
| 21.1799 | por tanta indolencia, le quitó | entonces al cadáver el pañuelo de la cara, y |
| 25.1479 | sabían que todo sería diferente desde | entonces, que sus casas iban a tener las puertas |
8 | | | entre | |
| 11.489 | piltrafas, como si hubiera navegado por | entre laberintos de corales. Notaron también |
| 13.549 | en círculo, contemplando el cadáver | entre puntada y puntada, les parecía que el |
| 13.1227 | que hubiera hecho brotar manantiales de | entre las piedras más áridas y hubiera podido |
| 17.214 | de que al ponerle la ropa, tendido | entre flores y con unos zapatos de charol |
| 17.2237 | a sollozar. Las otras, asentándose | entre sí, pasaron de los suspiros a los |
| 17.2673 | ellas sintieron un vacío de júbilo | entre las lágrimas.
-¡Bendito sea Dios |
| 25.477 | y le eligieron un padre y una madre | entre los mejores, y otros se le hicieron |
| 25.628 | del pueblo terminaron por ser parientes | entre sí. Algunos marineros que oyeron el |
15 | | | era | |
| 5.121 | el mar, se hicieron la ilusión de que | era un barco enemigo. Después vieron que no |
| 5.427 | y sólo entonces descubrieron que | era un ahogado.
Habían jugado con él toda |
| 7.722 | y sólo la forma permitía suponer que | era el cadáver de un ser humano, porque su |
| 9.49 | que limpiarle la cara para saber que | era un muerto ajeno. El pueblo tenía apenas |
| 9.216 | extremo de un cabo desértico. La tierra | era tan escasa, que las madres andaban |
| 9.422 | en los acantilados. Pero el mar | era manso y pródigo, y todos los hombres |
| 11.377 | lo hacían, notaron que su vegetación | era de océanos remotos y de aguas profundas |
| 11.804 | conciencia de la clase de hombre que | era, y entonces se quedaron sin aliento. No |
| 11.853 | se quedaron sin aliento. No sólo | era el más alto, el más fuerte, el más |
| 13.1428 | de hacer en toda una vida lo que aquél | era capaz de hacer en una noche, y |
| 17.0 | Tiene cara de llamarse Esteban.
| Era verdad. A la mayoría le bastó con |
| 17.625 | silencio acabó con las últimas dudas: | era Esteban. Las mujeres q ' ue lo habían |
| 17.2602 | con la noticia de que el ahogado no | era tampoco de los pueblos vecinos, ellas |
| 21.160 | de la noche, lo único que querían | era quitarse de una vez el estorbo del |
| 23.0 | los hombres se quedaron sin aliento.
| Era Esteban. No hubo que repetirlo para que |
3 | | | eran | |
| 17.127 | otro nombre. Las más porfiadas, que | eran las más jóvenes, se mantuvieron con la |
| 17.1754 | siquiera hasta que hierva el café, | eran los mismos que después susurraban ya se |
| 21.49 | creyeron que aquellos aspavientos no | eran más que frivolidades de mujer. Cansados |
1 | | | eréndira | |
| 3.47 | increíble y triste historia de cándida | Eréndira y de su abuela desalmada |
3 | | | es | |
| 19.33 | Bendito sea Dios -suspiraron-: | es nuestro!
Los hombres creyeron que |
| 25.2402 | idiomas, miren allá, donde el viento | es ahora tan manso que se queda a dormir |
| 25.2552 | dónde girar los girasoles, sí, allá, | es el pueblo de Esteban.
Encontrado en |
1 | | | esas | |
| 23.375 | con unos pantalones de sietemesino y | esas uñas rocallosas que sólo podían |
1 | | | escaldadas | |
| 17.1478 | talones en carne viva y las espaldas | escaldadas de tanto repetir lo mismo en todas las |
1 | | | escapularios | |
| 21.974 | porque querían ponerle al ahogado los | escapularios del buen viento, otras estorbando allá |
1 | | | escarpada | |
| 25.893 | de llevarlo en hombros por la pendiente | escarpada de los acantilados, hombres y mujeres |
1 | | | escasa | |
| 9.224 | de un cabo desértico. La tierra era tan | escasa, que las madres andaban siempre con el |
1 | | | escaso | |
| 17.328 | fue una ilusión vana. El lienzo resultó | escaso, los pantalones mal cortados y peor |
1 | | | escuálidos | |
| 13.1538 | de sus corazones como los seres más | escuálidos y mezquinos de la tierra. Andaban |
2 | | | esos | |
| 13.709 | como aquella noche, y suponían que | esos cambios tenían algo que ver con el |
| 13.1599 | de la tierra. Andaban extraviadas por | esos dédalos de fantasía, cuando la más |
1 | | | espaldas | |
| 17.1469 | con los talones en carne viva y las | espaldas escaldadas de tanto repetir lo mismo en |
1 | | | esparto | |
| 11.207 | Le quitaron el lodo con tapones de | esparto, le desenredaron del cabello los |
1 | | | espérate | |
| 17.1710 | quienes le decían no te vayas Esteban, | espérate siquiera hasta que hierva el café, eran |
1 | | | espinazo | |
| 25.1913 | de Esteban, y se iban a romper el | espinazo excavando manantiales en las piedras y |
1 | | | espléndidos | |
| 25.43 | así como le hicieron los funerales más | espléndidos que podían concebirse para un ahogado |
1 | | | esplendor | |
| 25.1072 | la estrechez de sus sueños, frente al | esplendor y la hermosura de su ahogado. Lo |
1 | | | esta | |
| 23.953 | dicen, para no molestar a nadie con | esta porquería de fiambre que no tiene nada |
4 | | | estaba | |
| 7.617 | seguir creciendo después de la muerte | estaba en la naturaleza de ciertos ahogados |
| 7.770 | de un ser humano, porque su piel | estaba revestida de una coraza de rémora y de |
| 23.295 | podía ser uno en el mundo, y allí | estaba tirado como un sábalo, sin botines, con |
| 23.506 | de la cara para darse cuenta de que | estaba avergonzado, de que no tenía la culpa |
4 | | | estaban | |
| 9.592 | a los otros para darse cuenta de que | estaban completos
Aquella noche no salieron a |
| 11.438 | y de aguas profundas, y que sus ropas | estaban en piltrafas, como si hubiera navegado |
| 11.967 | visto jamás, sino que todavía cuando lo | estaban viendo no les cabía en la imaginación |
| 25.1379 | otros para darse cuenta de que ya no | estaban completos, ni volverían a estarlo jamás |
2 | | | estado | |
| 7.324 | caballo, y se dijeron que tal vez había | estado demasiado tiempo a la deriva y el agua |
| 13.649 | sido nunca tan tenaz ni el Caribe había | estado nunca tan ansioso como aquella noche, y |
1 | | | estar | |
| 23.1047 | Había tanta verdad en su modo de | estar, que hasta los hombres más suspicaces |
1 | | | estarlo | |
| 25.1413 | ya no estaban completos, ni volverían a | estarlo jamás. Pero también sabían que todo |
1 | | | este | |
| 23.878 | para no andar ahora estorbando con | este muerto de miércoles, como ustedes dicen |
12 | | | esteban | |
| 15.24 | suspiró:
-Tiene cara de llamarse | Esteban.
Era verdad. A la mayoría le bastó con |
| 17.629 | acabó con las últimas dudas: era | Esteban. Las mujeres q ' ue lo habían vestido |
| 17.1322 | suplicaba muerta de miedo siéntese aquí | Esteban, hágame el favor, y él recostado contra |
| 17.1701 | nunca que quienes le decían no te vayas | Esteban, espérate siquiera hasta que hierva el |
| 17.2395 | se les iba volviendo cada vez más | Esteban, hasta que lo lloraron tanto que fue el |
| 17.2520 | más manso y el más servicial, el pobre | Esteban. Asi que cuando los hombres volvieron |
| 23.4 | hombres se quedaron sin aliento.
Era | Esteban. No hubo que repetirlo para que lo |
| 23.243 | con su arcabuz de matar caníbales, pero | Esteban solamente podía ser uno en el mundo, y |
| 23.1316 | en los tuétanos con la sinceridad de | Esteban.
Fue así como le hicieron los |
| 25.1608 | más firmes, para que el recuerdo de | Esteban pudiera andar por todas partes sin |
| 25.1882 | alegres para eternizar la memoria de | Esteban, y se iban a romper el espinazo |
| 25.2568 | girasoles, sí, allá, es el pueblo de | Esteban.
Encontrado en: http://www.gador.com |
1 | | | esto | |
| 17.1858 | qué bueno, ya se fue el tonto hermoso. | Esto pensaban las mujeres frente al cadáver |
1 | | | estoperoles | |
| 21.1346 | mayor para un forastero, si por muchos | estoperoles y calderetas que llevara encima se lo |
1 | | | estorbaba | |
| 17.1002 | si hasta después de muerto le | estorbaba. Lo vieron condenado en vida a pasar de |
3 | | | estorbando | |
| 21.920 | amuletos de mar en los arcones, unas | estorbando aquí porque querían ponerle al ahogado |
| 21.1010 | los escapularios del buen viento, otras | estorbando allá para abrocharse una pulsera de |
| 23.863 | en los acantilados, para no andar ahora | estorbando con este muerto de miércoles, como |
1 | | | estorbes | |
| 21.1126 | quítate de ahí mujer, ponte donde no | estorbes, mira que casi me haces caer sobre el |
1 | | | estorbo | |
| 21.187 | que querían era quitarse de una vez el | estorbo del intruso antes de que prendiera el |
2 | | | estoy | |
| 17.1421 | sonriendo, no se preocupe señora, así | estoy bien, con los talones en carne viva y |
| 17.1564 | las visitas, no se preocupe señora, así | estoy bien, sólo para no pasar por la |
1 | | | estrechez | |
| 25.1037 | sus calles, la aridez de sus patios, la | estrechez de sus sueños, frente al esplendor y la |
1 | | | estrechos | |
| 17.391 | mal cortados y peor cosidos le quedaron | estrechos, y las fuerzas ocultas de su corazón |
1 | | | estrella | |
| 25.2234 | uniforme de gala, con su astrolabio, su | estrella polar y su ristra de medallas de guerra |
1 | | | estremecieron | |
| 23.1265 | hasta ésos, y otros más duros, se | estremecieron en los tuétanos con la sinceridad de |
1 | | | estremecimiento | |
| 17.781 | la barba no pudieron reprimir un | estremecimiento de compasión cuando tuvieron que |
1 | | | eternizar | |
| 25.1858 | las fachadas de colores alegres para | eternizar la memoria de Esteban, y se iban a |
1 | | | excavando | |
| 25.1922 | Esteban, y se iban a romper el espinazo | excavando manantiales en las piedras y sembrando |
1 | | | expósito | |
| 25.93 | que podían concebirse para un ahogado | expósito. Algunas mujeres que habían ido a |
1 | | | extraviadas | |
| 13.1583 | y mezquinos de la tierra. Andaban | extraviadas por esos dédalos de fantasía, cuando la |
1 | | | extremo | |
| 9.176 | piedras sin flores, desperdigadas en el | extremo de un cabo desértico. La tierra era tan |